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Tanto la miopía como la miopía progresiva afectan a cada vez más personas de todo el mundo. La OMS estima que, en 2050, el 52% de la población será miope. La misma organización destaca que se necesitan 1.300 millones de dólares para atender a toda la población con baja visión o ceguera debido a problemas como la miopía magna.

Los cambios en el estilo de vida han creado condiciones que desencadenan una aparición más temprana de la miopía en los niños. Hasta el 90% de los jóvenes asiáticos menores de 20 años tienen miopía. Se han encontrado datos similares en América del Norte, India y Australia. La prevalencia de la miopía en Europa entre los niños en edad escolar es del 3% en preescolar (6 años), del 11% en la escuela primaria (7-10 años), del 20–30% en la escuela secundaria (11-17 años) y del 47% en jóvenes adultos de 25 a 29 años.

Todo esto no nos queda tan lejos en España. También aquí las cifras son alarmantes. Según el Libro Blanco de la Vision, publicado por FEDAO, con datos de 2022, el 55,3% de los jóvenes de 18 a 34 años y el 62,5% de los universitarios de 17 a 27 años es miope. La tasa de prevalencia no deja de aumentar en graduación y número de afectados entre las generaciones de nativos digitales: en cinco años, la ratio es de -3 o -3,75 dioptrías para uno de cada diez (0,75 dp por año), -2 o -2,75 dp para el 28,2% y -1 o -1,75 dp para el 26%. El 5,9% de los menores de 6 a 12 años ya es miope. Muchos de ellos podrían superar la barrera de las 6 dioptrías y convertir a su ojo en patológico. Y uno de cada cuatro jóvenes de 12 a 18 años afirma que no ve bien.

Como para casi todo en la vida, la solución está en la prevención. Sin embargo, y con datos aportados igualmente por FEDAO, un 59% de las familias no revisa la visión de sus hijos porque no han manifestado quejas y, mientras que dos de cada tres adolescentes han ido al dentista este año (2022), sólo uno de cada tres se ha sometido a una revisión visual. Así, cuando uno de cada tres menores (31%) podría tener un problema de visión no corregido, sólo el 11,4% de las familias llega a sospecharlo.

Para Zeiss, desde su condición de Fundación, la miopía es un desafío global, puesto que gran parte de lo que los niños aprenden y experimentan les llega a través de los ojos y, por lo tanto, la progresión de la miopía tiene un efecto negativo en su desarrollo normal.  Los riesgos a largo plazo en la edad adulta también representan una amenaza para la visión. Así, en el Día Mundial de la Visión celebrado el 12 de octubre, “antes que nada, recomendamos a las familias españolas que le den la dimensión que merece a la pandemia de miopía, y revisen la visión de sus hijos, al menos una vez al año”, señala Santiago Escandón, director de Producto y Marketing de Zeiss Vision España.

En este mismo sentido, Zeiss recuerda que las recomendaciones de los expertos en salud visual para los niños incluyen pasar más tiempo al aire libre para apoyar el desarrollo saludable del ojo y limitar el tiempo frente a la pantalla y el móvil a dos horas por día. Y, para los niños identificados como de riesgo particular, es fundamental un seguimiento de la progresión que se ajuste a la intervención elegida.

¿Cuáles son los riesgos del aumento de la miopía entre los jóvenes?

Con todos estos datos, los expertos concluyen que, si no se hace nada para evitarlo, muchos de estos jóvenes (Nativos Digitales) superarán las tasas de riesgo (5 dioptrías de miopía). El 40% de las personas con más de 8 dioptrías corre el riesgo de perder su visión debido a enfermedades de retina. El 20% de los casos de cataratas en pacientes más jóvenes sucede entre aquellos que tienen una alta miopía. El 20% de los pacientes con más de 15 dioptrías tendrá baja visión en su etapa adulta. El 10% de estos con más de 15 dioptrías puede terminar sufriendo ceguera y el 60-70% de los casos de desprendimiento de retina ocurre entre miopes altos con 40-60 años.

Por lo tanto, intervenir de forma temprana para controlar la progresión de la miopía es la mejor solución para evitar ulteriores y graves problemas de visión. “Cada dioptría cuenta e invertir en prevención visual es clave para un óptimo desarrollo de los más pequeños”, prosigue Santiago Escandón, director de Producto y Marketing de Zeiss Vision España.

El control de la miopía es exitoso cuando el crecimiento de la longitud del globo ocular puede ralentizarse hasta un crecimiento fisiológicamente normal, si es posible, mitigando así los riesgos de enfermedades oculares secundarias y limitaciones debidas a la miopía. El manejo de la miopía generalmente deberá continuarse hasta que el paciente tenga entre 18 y 20 años.

Zeiss ha condensado más de una década de experiencia en investigación básica y clínica, en el uso exitoso del Programa de Control de la Miopía en el sudeste asiático -el lugar del mundo más afectado por esta pandemia- para el desarrollo de su nueva gama de lentes oftálmicas: las lentes Zeiss MyoCare.

Lentes Zeiss MyoCare: eficacia y buena visión en una sola lente

Las lentes Zeiss MyoCare utilizan la innovadora tecnología C.A.R.E.: microestructuras para crear un desenfoque competitivo simultáneo en las áreas periféricas de la retina. Alrededor del centro de la lente con corrección óptima para los niños, la zona funcional incorpora cilindros concéntricos casi invisibles que se expanden hacia la toda periferia de la lente y que origina que se generen zonas de desenfoque y corrección alternas. Se ha demostrado que el desenfoque periférico que se logra de esta manera retrasa efectivamente el crecimiento de la longitud del ojo más allá de lo que es fisiológicamente normal, lo que ralentiza la progresión de la miopía.

Para evitar el desenfoque hipermetrópico en todas las direcciones de la mirada, Zeiss MyoCare utiliza una segunda tecnología innovadora: ClearFocus optimiza punto por punto la parte posterior de la lente.

La gama Zeiss MyoCare cuenta con dos diseños diferentes en función de la edad del paciente. Las nuevas lentes Zeiss MyoCare se pueden encontrar, de manera exclusiva, en los centros Zeiss Vision Center y los casi 400 Zeiss Vison Expert.

«La miopía progresiva requiere un sentido de responsabilidad particularmente alto, porque su manejo profesional marca el rumbo de la visión como un requisito previo esencial para el desarrollo de los niños. Por eso, recomendamos a los pacientes que, en todo lo que tiene que ver con su salud visual, se asesoren con profesionales acreditados, como los que van a encontrar en las ópticas Zeiss Vision Expert», concluye Escandón.

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