Fue hace meses que mi amigo, José Martin, me invitó a escribir unas líneas para su revista. Le conozco hace muchos años, nos conocimos en una ExpoOptica y desde entonces le voy siguiendo los pasos, siempre sorprendida por el conocimiento, la vitalidad, la creatividad, y el fuerte liderazgo que ostenta sobre todo su alrededor, porque ha convertido Optimoda en la referencia informativa de la industria óptica y audiológica en España. Fue, sin duda alguna, un honor recibir la invitación, al mismo tiempo que un gran desafío porque no me daba ninguna pauta. Así he decidido escribir algo sincero, personal y, al mismo tiempo, empresarial.
El 21 de febrero de 2018 aterricé en São Paulo para asumir la dirección general de la subsidiaria brasileña de GN Hearing (fabricante danés de audífonos como ReSound, Beltone, Interton, o Danavox) con el objetivo de realizar un proceso de turnaround, es decir “dar la vuelta” a la empresa para convertirla en un negocio viable.
El proceso de transformación de la compañía ha sido una metamorphosis maravillosa en el cual merece la pena hacer una pausa. Comenzamos con un plan de alto impacto para los primeros cien días. Se contrató una pequeña consultora para un estudio en profundidad de las áreas comerciales, recursos aplicados, rentabilidad por canal, por cliente etc. Si bien el resultado estaba alineado con las impresiones iniciales, era necesario un aporte de información objetiva sobre la que trabajar y sobre la que establecer unas expectativas realistas en tiempo, calidad y cantidad. En esos primeros cien días se entrevistó a todo el personal, se mantuvieron reuniones para entender los roles, el potencial individual. También se realizaron reuniones para tranquilizar al personal, a los clientes, y liderar la información en el mercado. La nueva estructura del organigrama fue una herramienta de comunicación para transmitir la nueva cultura con foco en el cliente, y la responsabilidad, accountability, dirigida a la acción mediante la cooperación interdepartamental. El organigrama ayudó a transmitir la visión y comenzar una nueva cultura. Ahora, casi seis años después, se ha duplicado la facturación, reducido los gastos operacionales en treinta por ciento y multiplicado por cuatro el beneficio neto de la subsidiaria. Estoy inmensamente agradecida por haber sido parte de esta transformación y de estos merecidos resultados de todo el equipo.
Deberíamos realizar esos procesos de reinvención periódicamente en nuestras vidas, incluso si no se están hundiendo o están a la deriva, sino como parte de una auditoria de viabilidad que revisa nuestros procesos, hace una comprobación con la realidad y nos proporciona objetivos para conquistar.
“La mujer se ve en la necesidad de arriesgar mucho más para poder avanzar”
Otro punto sobre el que cabe la posibilidad de conversar es el liderazgo femenino, el techo de cristal y cómo la mujer se ve en la necesidad de arriesgar mucho más para poder avanzar. El hombre va avanzando en la corporación con pequeños movimientos estratégicos. La mujer se ve obligada “a jugar todo al rojo”, y, con frecuencia, la apuesta involucra no solo aspectos profesionales sino también personales. En la misma línea podríamos considerar la quiebra de los paradigmas a la que la mujer debe hacer frente en su carrera corporative; como ejemplo, un estudio de Harvard indica que, desde una perspectiva meramente económica, tiene sentido que una mujer intente ser lo más delgada posible pues existe una correlación entre sobrepeso y una menor retribución. Es por eso comprensible que la directora Greta Gerwig mencione este asunto en su película Barbie. Volviendo a los paradigmas para ser quebrados; en mi caso eran muchos: mujer, mediterránea, bajita, con sobrepeso, con una licenciatura en humanidades.
Y, sin embargo, todas esas características individuales, que me alejaban del estereotipo de CEO expatriado, han sido sin duda las que me diferencian y hoy considero como grandes activos. Aprovecho para recalcar la importancia del networking, y yo lo reinterpretaría como tener el apoyo de quien cree en ti y está dispuesto a apostar parte de su capital político corporativo para conseguirte una oportunidad. Dentro del networking, hoy se discute la relevancia de las redes abiertas frente a cerradas, también densas frente a leves. Una red abierta consiste en una interacción con grupos diferentes de personas, de diferentes entornos empresariales y de influencia. Una red abierta nos permite agregar un valor mayor a nuestras empresas, y esto también es un buen indicador de éxito corporativo.
Otro asunto clave en toda esta historia es el aprovechamiento de nuestras historias. Somos el producto de todo lo acontecido en nuestras vidas hasta este mismo instante. Sin duda, el discurso Connecting the Dots, de Steve Jobs, ejemplifica maravillosamente este concepto de que el presente se conforma como fruto de todo lo que aconteció en nuestra vida hasta este momento.
“No puedes conectar los puntos hacia adelante; solo se conectan en retrospección. Por eso tienes que confiar en que los puntos se conectarán en tu futuro.” – Steve Jobs
Personalmente encuentro dos interpretaciones a estas palabras. En primer lugar, no se trata solo de confiar. Todo ese conocimiento adquirido y experiencia de vida nos configuran como seres únicos e irrepetibles que nos dotan de unicidad universal. Por otro lado, debemos pensar que todos los conocimientos y vivencias pueden ser fuente de una oportunidad. No solo se trata de recibir y encarar la oportunidad sino también de estar preparados para el momento en que aparezca.
“No solo se trata de recibir y encarar la oportunidad sino también de estar preparados para el momento en que aparezca”
Otro punto que conversaría tête á tête con José sería la expatriación, redefinida como la vuelta al nomadismo impulsado por la búsqueda de una vida de mayor calidad. Cada día es más común aceptar sin cuestionamientos que nuestros jóvenes, y no tan jóvenes, hagan las maletas para dejar su país, y con ello su cultura, su gastronomía, su familia y amigos, para buscar nuevas oportunidades. Y con ello aparece una gran encrucijada de crecimiento, de apertura cognitiva, de creación de nuevas conexiones neuronales. Y también, con frecuencia, un sentimiento de desarraigo y de falta de pertenencia que impacta a la persona, incluso si la persona se las apaña para estar feliz y sacar lo mejor de esa situación.
En la historia de la humanidad, el Homo Sapiens fue primero nómada y posteriormente sedentario. El sedentarismo fue propiciado por la conveniencia del establecimiento, que evitaba volver continuadamente a la posición de salida con los inevitables esfuerzos que eso suponía, además de factores como la agricultura como modus vivendi, que obligaba a mantener la posición para poder cosechar, o criar a los niños con mayor facilidad de lo que era posible durante un viaje ininterrumpido entre otros. Y es ahora, cuando somos de nuevo nómadas, propulsados por la necesidad de mejorar o por el canto de las sirenas que, en muchas ocasiones, son inevitables para las almas inquietas.
Muy ligado al punto anterior, podríamos considerar la adaptación cultural. Mi lugar destino, Brasil, nos hace pensar en playas paradisiacas, bossa nova, caipiriñas, sonrisas amplias. No es sencillo llegar a una nueva ciudad, asumir una nueva posición y aprender un nuevo idioma a las puertas de la cincuentena, pero es una experiencia gratificante. Brasil ofrece una riqueza cultural basada en el mestizaje durante los últimos quinientos años. Diferentes olas de inmigración han convertido el pueblo brasileño en una amalgama de colores donde todos tienen cabida. La diversidad de sus fundadores ha creado una sociedad tan rica a la que es difícil no sucumbir. Existen desafíos estructurales y grandes diferencias sociales pero las oportunidades son inmensas, hay mucho por hacer, por crear y todo por conquistar.
Gracias, José, por esta oportunidad de compartir esta aventura maravillosa.
Este artículo de opinión se publicó originalmente en la revista Optimoda correspondiente al segundo semestre 2023.
Optimoda 216 Segundo semestre 2023